El colágeno es una proteína esencial de la piel, las articulaciones o los huesos y con los años el organismo reduce su producción. Los alimentos ricos en proteínas y los que ayudan a generar colágeno contribuyen a compensar esa pérdida natural.
Articulaciones, piel, huesos, músculos, tendones… Su buen estado depende en gran medida de los niveles que tengamos del colágeno, la proteína más abundante del cuerpo. El colágeno es el responsable de la elasticidad de estos tejidos y el organismo lo produce de forma natural pero con la edad se pierde.
Para ayudar al organismo a generar el colágeno necesario y reducir la pérdida a causa de la edad es importante incluir en la alimentación alimentos que aporten proteínas completas (con todos los aminoácidos esenciales) o que ayuden a generar colágeno como la vitamina C. Los aminoácidos procedentes de la dieta llegan hasta el hígado y este los libera cuando las células los necesitan para producir hormonas, enzimas para funciones concretas, anticuerpos o también colágeno.
Los siguientes alimentos contienen esta proteína en su composición y otros nutrientes que contribuyen a que el organismo la produzca.
Entre los alimentos de origen animal, la carne es una de las mejores fuentes de colágeno que podemos encontrar. Comiendo carne conseguimos que nuestro organismo disponga de los aminoácidos suficientes para que los cartílagos y las articulaciones estén en buen estado.
- Escoge bien las piezas. Es preferible la carne magra como el pollo, el pavo o el conejo.De este modo, evitarás las grasas saturadas que contiene la carne roja (cordero, ternera o cerdo).
Incluir un par de días a la semana en tu dieta un plato de sardinas, una ración de caballa o unos filetes de salmón sería perfecto para tu salud cardiovascular, pero también para la de tu piel y tus huesos.
- Su alto contenido en ácidos grasos omega 3 previene la oxidación celular y actúa como un potente antiinflamatorio.
Aunque su principal cualidad es su aporte proteico, el huevo también destaca como productor de colágeno. Esto contribuye a que la masa ósea esté fuerte.
- Se recomienda que una dieta completa y equilibrada que incluya dos huevos a la semana.
No solo los alimentos de origen animal son ricos en colágeno, también las frutas y verduras son una interesante fuente de esta proteína. Es el caso, por ejemplo, del limón, una fruta repleta de vitamina C que actúa como un antioxidante natural.
- Los limones contribuyen en la producción de colágeno y, por tanto, hace que nuestra piel se vea más tersa y rejuvenecida.
La razón de incluir esta hortaliza en la galería está en el azufre que contiene. Esta sustancia ayuda a mejorar la circulación sanguínea (incluida la del cuero cabelludo) y aumenta la producción de colágeno.
- Añade unos trocitos a tus ensaladas.Para evitar el lagrimeo puedes probar con uno de los muchos trucos que circulan. Entre ellos, el de dejar la cebolla en el congelador al menos una hora antes de cortarla.
Un puñadito de nueces, pistachos, piñones, avellanas o castañas puede ser una buena manera de cuidar de tu piel.
- Su alto contenido en ácidos grasos omega 3, omega 6 y omega 9 estimulan la producción de colágeno, lo que no tardará en dar resultados visibles con un piel más tersa.
Contienen licopeno, una sustancia que, además de ser un excelente antioxidante, contribuye a la secreción de colágeno. También lo encontrarás en la sandía, las cerezas, las fresas o las frambuesas.
- En esta época del año,tan propensa a los resfriados, te vendrá muy bien un extra de vitamina C, lo cual puedes encontrar especialmente en los pimientos.