Cristiano Ronaldo se encontró con la cajera de McDonald’s que le regalaba hamburguesas cuando era pequeño.

En el universo glamuroso y lleno de trofeos de Cristiano Ronaldo, pocos conocen las difíciles batallas que el astro portugués enfrentó en su infancia. En una reveladora entrevista con Piers Morgan en «Good Morning Britain», Ronaldo compartió una conmovedora historia que destaca su resiliencia en los momentos más difíciles.

A los 12 años, cuando aún no vislumbraba la grandeza que le esperaba en el mundo del fútbol, Ronaldo se encontraba en una situación desafiante. Sin recursos financieros y lejos de su familia, vivía en la pensión del Sporting Lisboa junto a otros jóvenes jugadores de diferentes regiones de Portugal. Fue en esos momentos difíciles que surgió una conexión especial con un lugar que representaba mucho más que una simple cadena de comida rápida: McDonald’s.

En las proximidades de su residencia, Ronaldo y sus compañeros acudían a un McDonald’s local donde, en situaciones excepcionales, tres empleadas, entre ellas una mujer llamada Edna, les ofrecían hamburguesas gratuitas cuando quedaban excedentes. Esta inesperada muestra de generosidad se convirtió en un apoyo vital para el joven Cristiano, dejando una huella imborrable en su memoria.

La historia tomó un nuevo giro cuando, tras la revelación de Ronaldo, una de las mujeres involucradas, Paula Leça, fue identificada por una radio portuguesa. Paula, quien ahora rememora esos momentos con una sonrisa, explicó cómo, cuando sobraban hamburguesas, el gerente les permitía ofrecerlas a quienes las necesitaban, entre ellos un Cristiano Ronaldo aún tímido y reservado.

«Él siempre llegaba alrededor de las 11 de la noche para ver si teníamos sobras. Se permitía llevar a casa las sobras de hamburguesas y papas. Siempre tenían que esperar hasta el cierre, porque podría haber un cliente, con Ronaldo siempre detrás de los demás», compartió Paula Leça durante la entrevista.

Esta revelación no solo destaca la lucha de Ronaldo en su juventud, sino también la importancia de pequeños actos de bondad en la formación de un futuro ícono del fútbol mundial. La conexión entre Ronaldo y las empleadas de McDonald’s se convirtió en un testimonio de solidaridad que, décadas después, sigue resonando.

El gesto de Cristiano Ronaldo al buscar a estas mujeres, a quienes espera invitar a cenar en Turín o Lisboa para expresar su gratitud, refleja la humildad y el agradecimiento arraigados en su carácter. Paula Leça, al enterarse de la intención del futbolista, expresó su disposición a aceptar la invitación y compartió su emoción por la posibilidad de reunirse con el ahora famoso delantero.

La historia de Cristiano Ronaldo no es solo la de un atleta excepcional; es un recordatorio de que detrás de los trofeos y el reconocimiento mundial, hay un ser humano que ha superado desafíos personales y que valora las raíces de su humilde origen. Este capítulo revelador añade una dimensión más profunda a la figura de Ronaldo, recordándonos que incluso las leyendas del deporte llevan consigo historias de lucha, perseverancia y, en este caso, hamburguesas que representan más que solo comida rápida.