En un emotivo concierto en Buenos Aires, Argentina, el 12 de noviembre, la renombrada superestrella del pop, Taylor Swift, no solo deslumbró a sus fans con su talento, sino que también tomó un momento para abordar un tema de gran relevancia: la seguridad durante sus presentaciones. El evento, parte de su gira “The Eras Tour”, había sido previamente pospuesto debido a condiciones climáticas desfavorables, lo que aumentó aún más las expectativas de la multitud ansiosa.
Mientras interpretaba con gracia la cautivadora melodía de “Evermore” desde su piano, Taylor Swift se vio obligada a dirigirse a la audiencia debido a un incidente inesperado: un objeto fue arrojado al escenario. Con calma pero con una firme determinación, la artista expresó su preocupación por esta peligrosa tendencia de lanzar objetos al escenario, destacando la importancia de la seguridad en los conciertos y la responsabilidad que deben asumir los asistentes.
«El hecho de que la comunicación signifique tener límites suaves y saludables realmente me molesta cuando se lanzan cosas al escenario, realmente me asusta cuando se lanzan cosas al escenario. Porque si está en el escenario, un bailarín puede tropezar con él», compartió Swift con la multitud.
Además de señalar el riesgo que representan estos actos para los artistas, hizo hincapié en los posibles accidentes que podrían ocurrir, como que uno de sus bailarines pudiera tropezar con un objeto lanzado al azar.
”Me encanta que hayan comprado regalos y eso es muy lindo, pero, ¿podrían por favor no tirarlos al escenario?”, solicitó con afecto. “Los quiero mucho”.
Curiosamente, tras el llamado de Taylor Swift a la responsabilidad, los fans argentinos, con la ayuda de las redes sociales, identificaron al presunto culpable de lanzar objetos al escenario. Sorprendentemente, se trató de un seguidor mexicano que asistía al concierto caracterizado como Taylor Swift y acompañado de un amigo caracterizado como el nuevo novio de la artista, Travis Kelce.
El recordatorio de Taylor Swift sobre la responsabilidad y el respeto por la seguridad durante los conciertos resuena más allá de este incidente específico. Subraya su compromiso no solo con la calidad de su actuación, sino también con la integridad de su equipo y la experiencia segura y positiva de sus admiradores. Este episodio destaca la importancia de mantener una interacción respetuosa entre artistas y seguidores, basada en la consideración mutua. La seguridad debe ser una prioridad para garantizar que los conciertos sigan siendo espacios de alegría y celebración para todos.