VIDEO Sasha Piqué, el hijo menor de Shakira, bailó frente al público en su colegio.

El carisma y el talento a menudo se heredan, y en el caso de Sasha Piqué Mebarak, el hijo de la renombrada cantante Shakira, este dicho se manifiesta de manera sorprendente. Con tan solo nueve años, Sasha ha demostrado que la manzana no cae lejos del árbol al deslumbrar a todos con su pasión por el baile y su profundo amor por Colombia.

El escenario de su deslumbrante actuación fue un evento escolar en el Miami Country Day School, una institución que se distingue por su énfasis en el desarrollo artístico y deportivo de los estudiantes, así como por su compromiso con la preservación de las riquezas culturales. En esta ocasión, Sasha decidió mostrar su amor por Colombia a través de una enérgica coreografía de la cumbia colombiana titulada «La pollera colorá».

Ataviado con un traje tradicional que incluía el distintivo sombrero vueltiao, una pañoleta roja y una camisa blanca, Sasha no solo demostró una destreza sorprendente en sus movimientos, sino también un profundo orgullo por sus raíces colombianas. Su elección de la canción y su entrega apasionada dejaron una impresión imborrable en todos los presentes y, más allá de las aulas, en las redes sociales, donde cariñosamente lo han apodado ‘Shakirito’.

Este episodio no es el primer indicio del asombroso talento de Sasha. Su incursión en el mundo del baile sugiere que podría heredar directamente la habilidad de su famosa madre. Sin embargo, su relación con la música va más allá del baile. Junto a su hermano Milan, Sasha colaboró en el sencillo «Acróstico» de Shakira, donde demostró sus habilidades musicales tocando el piano y cantando parte de la letra.

El video viral de Sasha ha desencadenado una ola de elogios, no solo por su talento innato, sino también por el compromiso y la dedicación de Shakira para transmitirles a sus hijos el amor por Colombia y sus ricas tradiciones. La herencia cultural y el orgullo de sus raíces colombianas son valores que Shakira considera fundamentales en la educación de sus hijos.

El Miami Country Day School, la institución educativa donde Sasha y Milan estudian, es el entorno perfecto para nutrir y fomentar el talento y las raíces culturales de los jóvenes. A pesar de que Sasha nació en España, su participación destacada en la muestra folclórica subraya su fuerte conexión y respeto por las raíces colombianas de su madre y su familia materna.

El legado de Shakira trasciende la música y abarca un profundo compromiso con sus raíces y su cultura. La celebridad ha sido embajadora de Colombia en todo el mundo y ha utilizado su plataforma para promover la riqueza cultural y las tradiciones de su país natal. Al hacerlo, no solo ha dejado una huella imborrable en la industria musical, sino que también ha inspirado a las generaciones más jóvenes, incluyendo a su propio hijo, a mantener vivas las tradiciones culturales y el amor por Colombia.

En un mundo donde la cultura y la identidad a menudo se ven amenazadas por la globalización, es inspirador ver cómo una figura pública como Shakira trabaja incansablemente para transmitir estos valores a sus hijos y alentarlos a mantener viva la herencia cultural de su familia.

Sasha Piqué Mebarak ha demostrado que está dispuesto a asumir ese legado y honrar las raíces colombianas que su madre tanto valora. Con su enérgica interpretación de la cumbia colombiana y su pasión por el baile, Sasha se ha convertido en un joven embajador de la cultura colombiana, dejando claro que el amor por las raíces culturales es un regalo que trasciende generaciones. Su brillante actuación es un recordatorio de que el talento y la pasión pueden ser herencias poderosas, y en su caso, el futuro parece prometedor mientras continúa creciendo en un entorno que valora y celebra la diversidad cultural.